Probablemente los textos más delicados que maneje tu empresa sean los textos legales. Contratos, poderes notariales, escrituras… son textos que requieren gran precisión y que no pueden dejar espacio a ambigüedades.
Hay que tener especial cuidado a la hora de traducir textos legales. Una mala traducción en otro campo te expone a que el mensaje se pierda, pero una mala traducción de un texto jurídico puede acarrear consecuencias legales muy graves. Para no correr riesgos necesitas recurrir a un traductor especializado, familiarizado con los sistemas legales de ambas lenguas y capaz de traducir con rigor cada detalle del texto original, usando un vocabulario específico. La traducción legal y jurídica árabe español es una labor delicada que ha de dejarse en manos de profesionales.
Tradunia cuenta con un equipo de traductores especializados en Derecho que garantizan que la traducción legal y jurídica árabe español será precisa y simétrica al original. Además, si lo necesitas, los traductores jurados de nuestra plantilla pueden dar fe de que la traducción es una traducción fiel y completa del original.
Estos dos términos son muy similares y pueden prestarse a confusión. ¿Cuándo es necesaria una traducción legal y jurídica árabe español y cuándo una traducción jurada árabe español?La diferencia es que la traducción jurídica es la que se ocupa de textos relacionados con el mundo del derecho, mientras la traducción jurada es la que realiza un traductor-intérprete jurado oficial dando fe de que es fiel al original y completa.
En muchas ocasiones una traducción será de temática jurídica y además será una traducción jurada, por ejemplo, una patente extranjera traducida al español y presentada a la administración española como documento oficial, pero esta relación no se da siempre necesariamente. Puede darse el caso de una traducción legal o jurídica árabe español que no necesite ser jurada (por ejemplo, la traducción de un contrato para conocer sus contenidos), o de que una traducción necesite ser jurada pero que no sea de temática legal (por ejemplo, una cadena de e-mails aportada como prueba en un juicio). Si tienes dudas sobre si tu traducción necesita ser jurada o no, ponte en contacto con nosotros.
Envíanos el texto que deseas traducir para que lo valoremos y dinos el plazo en el que necesitas tenerlo traducido. Indícanos también si necesitas algún servicio extra (maquetación, edición de imágenes…) o quieres que cumplamos con algún requisito especial (terminología específica, estilo, traducción jurada…).
y evaluamos el encargo para analizar el volumen de trabajo, el grado de especialización y los plazos de entrega. De esta manera gestionamos nuestros recursos técnicos y humanos antes incluso de enviarte un presupuesto.
un presupuesto basándonos en la dificultad, volumen y urgencia del trabajo. Nuestros presupuestos son sensatos y exactos, sin sobrecostes ni sorpresas de última hora.
el trabajo al traductor cuya formación y experiencia mejor se adapten al encargo. Si el volumen es alto y el plazo de entrega corto, se le asignará el encargo a un gestor de proyectos que dirigirá al equipo de traductores especializados y será responsable del resultado final.
el texto, manteniéndonos en contacto contigo si fuera necesario y ayudándonos de los recursos con los que contamos (software de traducción, documentos de referencia, recursos terminológicos…). En caso de traducciones grandes el gestor de proyectos unificará la terminología y el estilo.
la traducción y realizamos un minucioso control final para asegurarnos de que cumple con tus expectativas y nuestras exigencias de calidad en materia de adecuación lingüística (corrección de estilo, terminología uniforme y coherente) y técnica (adecuación del texto al campo de especialidad y exactitud de conceptos y terminología).